¿Hay más gente dentro del círculo que fuera?

Quizás ya conozcáis esta imagen. Según su autor, hay más gente que vive dentro del círculo que fuera. ¿Es eso cierto?

En total hay, salvo que me haya confundido al contar, 25 países dentro del círculo. Algunos no están completos (caso de Indonesia, al que le faltaría su mitad de la isla de Nueva Guinea, donde residen unos tres millones de personas) pero vamos a obviarlo. En otros casos sí que habría trozos de países que no contamos aquí (por ejemplo, un buen pedazo de Rusia que incluiría ciudades como Vladivostok). Los países y sus poblaciones son los siguientes:

Así pues, son casi 3.900 millones de personas, millón arriba o abajo, los que residen en el área delimitada por el círculo. Según el reloj de la población mundial del Censo de EE.UU. la Tierra aloja a día de hoy a unos 7.100 millones de habitantes, lo que deja fuera del círculo a unos 3.200 millones de personas. Así pues, hay mucha más gente dentro del círculo que fuera. Eso nos ahorra calcular con exactitud las áreas de Pakistán, China o Indonesia que quedan fuera y sumar las zonas de Rusia o Afganistán que caen dentro.

La pregunta que surge es, ¿desde cuándo es esto así? La respuesta más fácil es que siempre ha sido así, al menos en el último par de milenios. A principios de nuestra era (el año cero o por ahí) el Imperio Romano, que abarcaba todas las orillas del Mar Mediterráneo, tenía 57 millones de habitantes. Sólo el Sudeste de lo que hoy es China ya igualaba esa cifra. En el siglo XVI la población de Asia suponía el 60% de la población mundial, cifra que más o menos se ha mantenido desde entonces.

Fuente: https://fronterasblog.com

Izquierda vs derecha…

La idea que yo tengo de la izquierda es precisamente lo que la diferencia de la derecha, es decir, es una cuestión de puntos de vista de la sociedad: la izquierda considera que la justicia es deseable y posible, y la derecha considera que la injusticia es el estado natural de las cosas y que no debe alterarse. La izquierda considera que la sociedad tiene una responsabilidad hacia todos sus miembros, y especialmente hacia los más desprotegidos, los más débiles, y la derecha considera que esto es una lucha en la que los más desprotegidos y los más débiles han perdido y que se jodan o dependan de la caridad. La izquierda considera que la igualdad de oportunidades es fundamental para que los mejores talentos puedan destacar y la derecha considera, más o menos, que el talento es hereditario. Que los hijos de los ricos resultan mejores empresarios que el chaval que está paseando con la fregona, porque son diferentes. Es decir, establece este tipo de diferencias.

Creo que esta es la base. La izquierda lucha por la igualdad, la justicia y la solidaridad; y la derecha no es que sea inhumana ni malévola, ni mucho menos. Una persona de derechas cree sinceramente que hay personas diferentes que merecen tener realidades diferentes. El más jodido, el más tonto y más incapaz, que no puede competir, que se joda: no tiene derecho a beneficios, a la salud, a la educación, a la vivienda, a la dignidad, derechos que sí tiene una persona que compite con éxito. Creo que ésa es la diferencia más básica y crucial entre las dos concepciones y estoy seguro de que no vas a encontrar nadie más que esté de acuerdo conmigo, porque todo el mundo tiene definición diferente, por supuesto.

Es decir, la izquierda es resultado de la Revolución Industrial y de la Ilustración. La izquierda se plantea cosas que no se había planteado nunca nadie, como que la soberanía puede no ser de los reyes y puede ser del pueblo. La Iglesia puede no tener la razón, puede haber otras formas de explorar el universo. La verdad no la tienen los curas, la puede tener la exploración racional del universo.

Fuente: http://lasoga.org

Una vulnerabilidad para gobernarlos a todos…

¿Qué son Meltdown y Spectre?

Meldown y Spectre son dos vulnerabilidades vinculadas al hardware de los microprocesadores instalados en casi todos los dispositivos. Los fallos fueron descubiertos por varios equipos entre los que se encuentran expertos de Google Project Zero, de la firma de seguridad Cyberus, o de universidades, como Pensilvania, Maryland y Graz.

El problema tiene como raíz la llamada ejecución especulativa. Cuando un procesador ejecuta código y llega un punto en un algoritmo en el que las instrucciones se bifurcan en dos direcciones distintas dependiendo de los datos de entrada, esas instrucciones ahorran tiempo «especulando» con el camino por el que se seguirá ejecutando el proceso. Básicamente lo que hacen es tratar de adivinar lo que va a pasar, por dónde va a seguir ejecutándose el programa, y adelantarse para ganar terreno y ventaja. Si el procesador se da cuenta de que esa apuesta especulativa era errónea, retrocede en el hilo de ejecución y tira a la basura ese trabajo.

Ocurre cuando, por ejemplo, se hace click en un documento de texto y aparecen varias alternativas: abrir, copiar, eliminar… De este modo, el procesador traza la línea de código necesaria para cada una de ellas con la intención de adelantarse al usuario y funcionar más rápido. ¿El inconveniente? Que a cambio deja un rastro aprovechado por vulnerabilidades como Meltdown y Spectre.

Como indican los analistas, Meltdown tiene la forma de un escudo derretido porque, literalmente, «derrite» los límites de la seguridad establecido por el hardware. Mientras, Spectre es un fantasma porque aprovecha para colarse tras la ejecución especulativa.

En el blog de Eben Upton, fundador de Raspberri Pi -plataforma que no se encontraría afectada al no implementarla-, es posible encontrar una descripción técnica paso a paso de la ejecución especulativa,

¿Cómo funciona cada uno?

Meltdown: El primero abre una puerta a los datos ocultos en la memoria del núcleo, rompiendo el aislamiento entre el «modo kernel» y el «modo usuario». En otras palabras: permite que un proceso con bajos privilegios (cualquier programa descargado) pueda acceder al núcleo y ver los datos privados reservados para este en el sistema (como contraseñas).

Spectre: Mientras, el segundo va más allá y rompe el aislamiento entre diferentes aplicaciones. A veces cuando ejecutamos un programa en realidad iniciamos muchos a la vez, y eso es lo que permite a Spectre usar la ejecución especulativa anteriormente señalada para conocer todos los datos almacenados en la caché de ese mismo proceso. Lo único positivo (si lo hay) es que esta vulnerabilidad es mucho más compleja de explotar.

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Flashear fonera 2100…

He aquí una guía rápida para flashear OpenWrt o ddr-wrtLEDE no está soportada- en una fonera 2100 con firmware 0.7.1r1 o inferior. Si tu fonera tiene un firmware superior quizás puedas realizar un downgrade pulsando el botón reset durante 15 segundos.

El objetivo es acceder vía Telnet, para lo cual existen 2 vías: puerto serie o ssh. En este caso nos centraremos en la segunda opción, si bien daremos antes unas pinceladas de como hacerlo mediante cable serie:

Acceder a la fonera con cable serie

Podremos realizarlo con ayuda de un arduino o una raspberry, según los siguientes esquemas de conexión, o bien adquiriendo un adaptador de usb a puerto serie.

  • Conexionado Arduino:

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El fraude de Nochevieja…

No es en realidad un fraude sino un método de blanqueo de dinero, y de tan simple como es, de tan tonto y tan fácil, es casi imposible de detectar.

En España es tradición que algunos locales organicen fiestas cobrando entrada, con barra libre, para celebrar la Nochevieja con entrada de año, cotillón y cogorza. Una buena proporción de locales dan el gran estacazo a Hacienda en esa fecha no declarando un duro de lo que ingresan porque no hay inspectores de Hacienda comprobando qué locales abren y cuánto venden, pero siempre hay algunos que utilizan el sistema contrario y esos, creo yo, son los que verdaderamente se llevan la tajada más grande.

¿Y cómo lo hacen? pues fácil: imaginad que tenéis treinta o cuarenta mil euros de dinero negro, obtenido durante todo el año y que no habéis declarado. Cuando llega la Nochevieja imprimís unos cuantos carteles, unos cuántos trípticos, y en un bar propio o ajeno, alquilado (de veras o sólo en apariencia) organizáis una gran despedida de año cobrando cada entrada, con barra libre, beso en la boca y caricia en el cogote 300 o 350 € por persona. Es una burrada, vale, pero nadie discute los precios que se declaran y en lugar de ocultar ingresos a Hacienda los estáis declarando, así que a falta de personal que inspeccione esa noche se lo van a creer. Se lo van a creer por narices (u otras glándulas).

¿Resultado de la operación? Que esa noche asistieron a vuestra fiesta 200 personas, lo que a trescientos euros por barba son 60.000 euros de ingresos. Ya tenéis blanqueada toda la pasta del año, tributáis por ella restando lo que sea de bebidas, serpentinas y personal y no hay alma humana que impugne eso.

Ya lo veis: no hay como una buena fiesta en la que todo el mundo, hasta los inspectores, esté de juerga para declarar que se ha ganado mucho dinero y convertir en blanco lo negro.

¿Quién sería capaz de recopilar las pruebas para demostrara lo contrario?

Feliz Año Nuevo y muy próspero Año Fiscal entrante.

Fuente: www.fraudefiscal.es