Microdemocracia disfuncional…
Cazurra es un pequeño pueblo de apenas 80 habitantes cercano a la capital de Zamora, el cual cuenta con unas poco acordes instalaciones deportivas, presumiblemente fruto del «café para todos» de la bonanza, compuestas por una pista de tenis y un frontón, encontrándose ambas infrautilizadas y en un pobre estado de conservación.
Durante la primera mitad del año hemos estado acudiendo a jugar al frontenis un grupo de amig@s a dicha instalación, la cual se encontraba siempre abierta y libre, hasta que una tarde recibimos la visita de una persona que se identificó como el alcalde del pueblo, al parecer Juan Carlos Casas Delgado. Al conversar hablar con él llama la atención su uso del posesivo al mentar las instalaciones y el pueblo, así como un marcado uso del «yo» («la subvención que yo he conseguido», «mi fuente, que yo he hecho», etc), lo que nos crea una idea del posible perfil «tipo» al que nos enfrentamos, el alcalde y su rancho, tan extendido en la meseta castellana.
Este nos informa que es obligatorio pagar para hacer uso del frontón, y si bien la puerta se encuentra abierta, es fruto de un error que será subsanado con la máxima celeridad. Nos interesamos por la razón de dicha tasa, a lo cual responde que busca regular el exceso de usuarios y está aprobada por el ayuntamiento desde hace años (BOP). Anonadados le exponemos que durante el medio año que llevamos acudiendo semanalmente a jugar NUNCA hemos encontrado a nadie en la instalación, por lo cual qué sentido tiene entonces. Llegados a este punto se nos despacha con un «aprovechad para jugar mientras esté la puerta abierta». Fin de la conversación.
Seguimos acudiendo durante la semana con normalidad hasta que una tarde aparece otro paisano que se identifica como alguacil (que no teniente alcalde), y llave en mano nos confirma que la orden ha sido ejecutada y acude a cerrar la instalación. A partir de ahora debe abonarse una tasa de 2 euros/hora y una fianza de 20 euros por la llave. Preguntado también por la razón del cobro alega «que se gasta». Alucinante.
Dada la situación registramos un escrito en el ayuntamiento solicitando explicaciones argumentadas de dicha tasa, aparte de aportar una alternativa constructiva:
Comentamos sobre…